22 septiembre 2021 | Noticias

Por: Duglas Balbín

“Como ciudadanos, tenemos una responsabilidad moral: contar las cosas buenas que pasan”. Lo expresa en esos términos Carolina Jaramillo Ferrer, al explicar por qué en este momento la comercializadora internacional Unibán está embarcada en un proyecto de particular trascendencia: consolidar y hacer visible su trabajo de sostenibilidad.

Al referirse a la importancia de esa iniciativa, subraya que “en la vida hay que dar ejemplo; somos un país acostumbrado a nombrar más las malas noticias, pero estoy convencida de que son muchas más las buenas que tenemos por mostrar”. Y lo cree así, convencida de que una compañía como Unibán, que es la mayor comercializadora de banano del país, debe divulgar lo bueno que pasa en una región o lo bueno que hace para que el mundo se transforme.

Carolina lidera el proceso que concluirá en pocos meses con la formulación y publicación del documento con que la comercializadora y sus filiales alinearán lo que han venido haciendo por décadas en las zonas productoras de banano y plátano (Urabá y Santa Marta); documento en que plasmarán los pilares de la estrategia que contribuirá a hacer de ese conglomerado y sus empresas un negocio sostenible.

Pero, como esta negociadora internacional y especialista en geopolítica deja claro, no es un trabajo que empiece de cero: desde su nacimiento, Unibán ha estado haciendo inversiones y jalonando proyectos con las comunidades, por ejemplo en construcción de vías y en las áreas de educación y vivienda. Muestra de ello es el Instituto Unibán, entidad que el año pasado completó 50 de servicios y ha ayudado a suplir las necesidades básicas en la zona de influencia de las operaciones de las empresas bananeras.

Las prioridades en sostenibilidad en Unibán

A pesar de que el proceso está próximo a la finalización, pero el contenido está en ajustes y aprobaciones, Carolina Jaramillo Ferrer explicó que son seis los asuntos considerados prioritarios para Unibán: la gestión ambiental, generación de valor en la comunidad, innovación y tecnología, rendición de cuentas, buenas prácticas laborales, y prácticas éticas asociadas a valores corporativos.

Precisamente lo ambiental es cada vez un desafío de mayor peso para una agroindustria como la bananera, teniendo en cuenta las tendencias del consumo, ya que como lo precisa nuestra invitada, los compradores son más estrictos con lo que se comen. Por ello Unibán acumula una gran cantidad de sellos y certificaciones, la mayoría como garantía de inocuidad.

Pero hay otra razón fundamental por la cual medio ambiente es uno de los asuntos materiales de interés para el grupo que lidera y representa Unibán: “nosotros trabajamos por la vida, necesitamos reproducción para que el negocio funcione; si nuestro principal aliado para que se dé la vida es la naturaleza, queremos que sea nuestro principal beneficiario también”, explicó Carolina Jaramillo. Y es por ello, por ejemplo, que en alianza con diversas instituciones tiene en marcha varios proyectos que apuntan al cuidado del agua, tanto en Urabá como en Santa Marta.

De otra parte, la compañía está comprometida con procesos de reforestación, con varios propósitos: la siembra al lado de acuíferos para proteger las fuentes hídricas y evitar que en épocas de sequía se reduzca el caudal. En ese proyecto, el foco está en fincas certificadas como “fair trade”. Y, de otro lado, la comercializadora internacional lidera también un proyecto de viveros escolares, que ayuda a trabajar desde las aulas para, entre otros fines, conservar corredores de biodiversidad y permitir la libre movilidad de especies.

Por otra parte, una de las tareas en que viene trabajando la organización se refiere a mitigación de impactos ambientales. Carolina Jaramillo explicó que, a pesar de no ser una industria de muchas emisiones, en Urabá está haciendo compras de energía verde, reemplazó el consumo de carbón por gas e inició el programa de medición de las huellas hídrica y de carbono, así como la definición de la forma de mitigarlas.

La mega corporativa y los ODS

Ya que la sostenibilidad es una de las ramificaciones de la meta grande y ambiciosa -mega- que está trazada por Unibán para el año 2025, el proceso que dirige Carolina Jaramillo Ferrer está apuntando, además, a definir la relación con los demás componentes de la mega.

El otro elemento relevante es la alineación de la estrategia de sostenibilidad con los Objetivos de Desarrollo Sostenible -ODS-, ya que si bien hay observancia de los mismos en iniciativas que están en curso, se trata de ampliar la ambición y precisar de qué manera alinearse con ese horizonte acogido en el seno de la Organización de Naciones Unidas, ONU.

Según lo explicado por Carolina Jaramillo, aunque es amplio el trabajo de Unibán en educación, vivienda, infraestructura educativa, formación para el empleo, entre otras áreas, la compañía contempla ampliar el radio de acción aprovechando ventanas del gobierno como el programa “obras por impuestos”, con lo cual se podría crecer el margen de los ODS con que actualmente se alinea.

 

Datos relevantes de Unibán
Unibán está vinculada al “Pacto por el agua”, iniciativa de la Gobernación de Antioquia. En Urabá, apunta a propiciar las condiciones de acceso a agua para población rural.

– El Instituto Unibán avanza con la construcción de un preescolar para incrementar la capacidad de niños.

– Mediante un programa de apadrinamiento, el modelo educativo del Instituto Unibán se está transfiriendo actualmente a seis escuelas, con el objetivo de mejorar la calidad.

– Unibán espera concretar una alianza con la Empresa de Vivienda de Antioquia, Viva, para acercar subsidios departamentales a trabajadores del sector bananero. Incluso plataneros, que suelen ser informales, podrían beneficiarse.

– Unibán, cada año exporta alrededor de 40 millones de cajas de banano y tres millones de cajas de plátano y otros productos.

Conoce otras historias de líderes en sostenibilidad en nuestro blog.